Cuidar la dieta para reforzar nuestro sistema inmune
Centro de Dia El Enebral en Madrid
Cuidar de nuestra alimentación, ayudará de forma directa a fortalecer nuestro sistema inmunológico. De esta manera, lograremos mejorar el funcionamiento de nuestras defensas y nos sentiremos mejor y cargados de energía.
Debemos aclarar, que no existe al menos de momento, ninguna dieta específica contra el COVID-19. Sin embargo, está demostrado que una alimentación equilibrada, rica en antioxidantes y en general variada y saludable, consigue reforzar nuestro sistema inmune.
Es decir, alimentándonos de forma correcta, se lo ponemos un poquito más difícil a todos esos agentes patógenos encargados de provocar infecciones. Y aunque por sí sola, la alimentación no garantice la prevención o la cura de esta enfermedad, ni de ninguna otra, sí nos podrá proporcionar mecanismos fundamentales para que nuestro organismo responda de manera favorable a una posible infección.
Por eso, desde nuestro Centro de Día El Enebral, te ofrecemos las siguientes recomendaciones para que no olvides incluir en tu menú de cada día.

Dieta para reforzar el sistema inmunológico
- Un aporte correcto de energía es fundamental. Ni por encima ni por debajo de las recomendaciones. Tanto la obesidad como una posible deficiencia de energía, están ligadas a una mayor incidencia de enfermedades.
- Una dieta baja en grasas y de calidad. Como las que encontramos en el pescado azul, en los frutos secos, en el aceite de oliva, etc…
- Mantenerse bien hidratado con la ingesta suficiente de leche, zumos, caldos, infusiones, y por supuesto agua. La hidratación es vital y en las personas mayores, es común que esa sensación de sed desaparezca o disminuya. Por eso, debemos beber frecuentemente y a ser posible hasta 1,8L diarios. Eso sí, evitando las bebidas azucaradas y las estimulantes como el té o el café.
- Consumir de forma regular lácteos fermentados como el yogur o el kéfir. Los lácteos en general, contribuyen al aumento de las defensas ayudando en la prevención de intoxicaciones alimenticias.
- Frutas y hortalizas frescas y de temporada. A ser posible, crudas, hervidas o asadas, antes que fritas. Una buena opción, es consumirlas en puré para ayudarnos a ingerirlas en el caso de que tengamos alguna dificultad para poder hacerlo. El ajo y la cebolla, por ejemplo, tienen un componente antiviral y antibacteriano muy potente. El brócoli, está considerado como un superalimento, repleto de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra. El jengibre, es una raíz conocida por sus grandes propiedades expectorantes, antitusivas y antiinflamatorias, combatiendo virus y bacterias, gracias a su alto contenido en potasio, niacina y vitamina C
- Consumir carnes y pescados evitando los grasos, los embutidos y los fiambres. Así como cereales y legumbres, a ser posible integrales.